Día 12-De Colonia Suiza a Refugio Jakob
Primero hay que llegar a Colonia Suiza. La Huella Andina está presentada para tomar un barco desde el Puerto de Quetrihue, al final del Bosque de Arrayanes, hasta Puerto Pañuelo, cercano a Colonia Suiza, pero puesto que no existe dicho barco, o existe en raras ocasiones, y uno nunca sabe si hay lugar para otro pasajero, y además es carísimo; por todo esto yo decidí llegar a Colonia Suiza por vía terrestre. Hay ómnibus desde Villa la Angostura hacia Bariloche, cuestan 36 pesos. Cuando uno llega a la terminal de Bariloche, debe dirigirse a la empresa de colectivos 3 de mayo, boletería al final del pasillo, y comprar un boleto “eventual” hacia Colonia Suiza. El colectivo es el número 10. El boleto cuesta 11 pesos. Hay varios horarios, más o menos cada dos horas. Se espera en la garita que está enfrente de la Terminal, donde paran todos los autobuses urbanos.
Una vez en el colectivo número 10, hay que bajarse en la última parada. Hay un camping justo antes de esta parada, llamado S.A.C, pero es mejor parar en alguno más adelante para ahorrar tranco al momento de tener que enganchar la senda hacia el Refugio Jakob. Hay varios campings más adelante, Goye, donde yo paré está muy cerca, después está SER, y después hay otro más llamado Ruca (algo).
El Goye cuesta 25 pesos, tiene enchufes, luz, wifi, ducha hirviendo, fogones, mesitas. Hay un restaurante y hay más restaurantes, despensas, verdulerías a pocos metros del camping.
Para llegar al Goye o a cualquiera de los otros, de donde uno baja del 10, enfrente del restaurante Berlin, tiene que meterse hacia la izquierda, bajar hacia Colonia Suiza. Esa calle, más adelante, se une con la ruta por la que veníamos, y por ahí hay que caminar hasta encontrar la senda.
Y así empieza la caminata hacia el Refugio. Saliendo bien temprano y caminando por el camino de ripio, entre 6 y 7 km hasta encontrar la Huella que sale hacia la derecha. No hay forma de llegar de otra forma para tomar la huella, así que los 12 km y medio de este día hay que sumarle los 6 o 7 que nos lleva hasta encontrarla. Pasan algunos autos de pobladores, pero el camino está clausurado por derrumbes, así que prácticamente el tráfico es nulo. Pasan algunos ciclistas, por deporte.
Cerca de un arroyo llamado Casa de piedra, sale la senda. Sube. Primero pasa por una tranquera y después por la casa de un poblador. Ahí se divide para los que quieren ir al Cerro Bellavista y los que suben a Refugio Jakob.
Sube, baja, bordea el arroyo que es una hermosura, una sonoridad espeluznante, es turbulento, arrebatador, te envuelve con esa sensualidad de las aguas sacudiéndose entre las piedras. Una hermosura, realmente. Hice un video porque quería rescatar y preservar esa música única del agua.
Sigue, sube y baja. Es todo tranquilo al principio. Y se guarda la parte más dura para la última hora de caminata en la que empieza un ascenso pronunciado increíble y único, hasta ahora no me había tocado una subida tan brava. En mi caso, ir parando, sino el corazón parece que se va a salir. Para esto uno ya viene con las energías agotadas por un traqueteo normal que ya lleva varias horas.
Desde el camping al acceso, me tomó una hora y media de caminata firme, paso largo y sin descansar. Al llegar al inicio de la Huella, bajé bártulos y me pelé una naranja. Los mismo dos horas después junto a un arroyito. La Huella toma normalmente 6 horas. Yo descansé varias veces y no me tomó más que eso, más la hora y media desde el camping al inicio.
Hay que cruzar dos puentes colgantes. Un puente viejo, poco antes de comenzar el ascenso bravo. Y otro puente que han hecho nuevo, antes de la trepada por piedras. Sí, porque esta vez el trekking normal se acaba ahí. Hay piedras, y hay que trepar, y trepar por las piedras mientras a nuestra izquierda, discurre estrepitosamente una cascada que se viene debajo de las montañas, una catarata, justo sobre nuestra izquierda, suicidándose en el vacío de un precipicio. Esta parte me pareció tan alucinante. El viento en la piedra. Las montañas alrededor que son increíbles, con tantas cúpulas como una verdadera catedral, y nieva en las cumbres. Una belleza. Hoy fue un día verdaderamente excitante de caminata. A pesar de no haber dormido casi nada anoche porque había joda afuera y porque me quise levantar a las 6 para salir con toda la fresca, me siento fuerte por la adrenalina y la emoción.
Al llegar aquí uno puede dormir en el Refugio. Está muy lindo. También se puede acampar en los alrededores, gratis, por supuesto acampo. En el Refugio, Aisa, prepara cena completa por 100 pesos y unas tartas deliciosas. Hoy justo estaba mi favorita, con dulce de leche y coco, una porción, 15 pesos, y me fui con porción, de aceptable tamaño y mates, a la vera del lago Jakob. Esto es una belleza, quién pudiera ser refugiera de este refugio. Precioso lugar. Inmejorable. Todo el entorno. Bellísimo.