Regresé de La Esperanza. Comayagua-Honduras-9 de noviembre

Fui hasta La Esperanza pero no me gustó. Es un pueblo dónde según dicen las informaciones se mantienen algunas tradiciones de comunidades aborígenes lencas.
Fue que después de conducir por una carretera que en tramos estaba en reparación y había largaaas colas, entré a un camino bello, de esos de montañas puramente verdes y exhuberantes. Muy lindo. Imaginé que el pueblo me gustaría porque en los carteles versaba… «aquí comienza la ruta colonial y de los volcanes». Me ilusioné al pedo. Llegando hacía frío y viento. Eso me lo habían anticipado, es una de las sierras más altas de entre las honduras. Sin embargo no fue por eso, ya que llevo mi abrigo de duende y no me acobarda el frío, fue en parte el antipático del hotel, el precio del cuarto que exedía mi presupuesto. Ya he hablado de esto en otras oportunidades y sí el presupuesto es magro, pero se consigue y de buen aspecto. Ya ven. Anoche por ejemplo en D & D todo fue super fenomenal y entre comida y dormida y ducha y excelente compañía y buenos momentos no gasté más de 10 dólares. Fue a lo mejor una exepción, porque sí fue excepcional.Ahora el tipito de La Esperanza me quería cobrar como 350 lempiras que son casi 20 dólares y está en pedo, el hotel ni valía la mitad. Las calles estaban mojadas, encharcadas, pozeadas y rotas. Me fui al carajo.
Eso significó, primero encarar otra ruta, al cabo de pocos kilómetros era de tierra. Así que otra vez, media vuelta, march, pa’tras. Hay que seguir algún consejo del «dolape» que algo de fierros sabe y dice que si ando en terrenos escabrosos no sé qué cazzo se me va a romper.
En fin, me volví 100km y encaré el rumbo a Tegucigalpa con la idea de entrar en Comayagua que tantas veces se escucha gente que llama a Radio Globo.
Acá estoy. Es una ciudad agradable, pero a esta hora, serán las 6 de la tarde ya casi todo está cerrado. Ebncontré un hotelito bastrante como la gente y una covhera, todo suma menos de 10 dólares. Perfecto! Ya anduve caminando por ahí y me compré para hacerme unos sánguches de jamón y queso.
Las chicas que regentean el hotelito parecen copadas y simpáticas. Después charlaré ahí un ratito con ellas.
Acá, no pasa nada.
Siento que cuando hablo con la gente, les pregunto algo, como si hbalara otro idioma, no me entienden. En general no parece haber mucho interés por nada. Como la otra vez… hace dos meses… la misma sensación, una confusión por un lago, un desinterés por otro, y en medio, escucho la radio y cada Pepe, lobizón o goriletti, siguen con su campaña como si nada.
Van abrazos y mañana no sé…
Hay un parque nacional cerca de Tegusigalpa. Si no es complicado me mando un día por ahí y si no… tengo que consultar con el mapa, pero ya ando con ganas de visitar al camarada Dani.
Van algunas fotos con retraso de ayer, de Lago Yojoa y el lugar donde dormí, colchón de aire, colección de piezas precolombina de Bob, fotos de flores exóticas, bromelias, plantas para escurrir shampoo, herbal essence al natural y a la mano y también de la ruta de hoy donde cuando esperábamos unos nenitos vinieronb a charlar y de paso tomarse unos matecitos conmigo.
y van abrazossssssss

4 comentarios sobre “Regresé de La Esperanza. Comayagua-Honduras-9 de noviembre”

  1. Jajaja las caritas de los nenitos hondureños 😛 Que lástima que 2 meses después la situación sea la misma, que cada político siga con su campaña y se ignore totalmente que estan bajo un gobierno de facto. Espero que esta experiencia quede en contraste con la de los demás paises latinoamericanos. Confío en que vas a tener una experiencia muy linda cuando pases por Venezuela. Besos!

  2. Banco de Imágenes, respondo a tu comentario, no hay problemas que divulgues ni las imágenes ni la información que aquí se publica y que puede servir de utilidad a otros viajeros por América Latina, saludos y adelante!
    Gracias,
    María

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