Esta mañana, aún en Matagalpa, fui a la casa de José Amador Fonseca, líder sandinista oriundo de esa ciudad. Di otra vuelta por el centro y volví al hotel donde charlé y tomé unos mates con Ángela.
Salí de Matagalpa hacia Jutiaga, subiendo una cadena montañosa, uno de los escenarios naturales más preciosos que en cuanto a camino he visto en Nicaragua. La ruta está un poco rota, buraco por aquí y por allá, pero yo voy despacio, voy mirando… las montañas cultivadas, las plantaciones de café, el olor en el aire, respiro fuerte… mmm… y sigo subiendo a la ciudad de las brumas por un camino bordeado de flores naturales y de puestos que venden más flores, abundan las flores, los viveros y las fincas cooperativas de café, de café café y de café orgánico.
Sigo hablando con la gente. No quiero ser densa con mis impresiones. El nivel de organización, la cohesión que existe en toda la comunidad en pos de un proyecto y el conocimiento que se les brinda para que todos estén al tanto de cómo va a funcionar. La organización es lo que me deja pasmada y la confianza del pueblo también en lo increíble pero realizable. La entrega. La solidaridad.
Se trabaja en la producción vacuna, para exportación y vacuna para extracción de leche, consecuentemente se trabaja en la instalación de los tambos, paralelamente se entregan chapas para cumplir con el proyecto techo para todos.
Ayer, las mujeres de Matagalpa presentaron un festival en la radio, radio comunitaria, en el festival presentaron los discos que les grabaron a los grupos que ganaron un concurso previamente organizado para la gente del campo, de las fincas en los alredodres de Matagalpa y Jutiaga, la gente de la montaña que también hace poesía y le pone música y la canta pero que esta mujer explicaba a veces se les hace tan difícil llegar a un estudio de grabación y darse a conocer, ellas lo hacen posible. Piensan en todo.
Me sigue conmoviendo. No quiero ser pesada. Esto está funcionando y para mí que es un sueño. Un sueño hecho realidad… qué sé yo… ando tanto que a veces dudo de seguir en la tierra o en esta dimensión, hay tanto para mirar, tanto para ver, oler, probar, escuchar, aprender…
La comida es barata, una enchilada 5 córdobas, una empanada 5 córdobas, cuando querés acordar te llenaste la panza con el valor de un dólar. Todo el mundo me calienta el agua en su cocina, el agua de la canilla es potable, gasto en gasolina nomás, cuesta 25 dórdobas la súper, creo que es por litro… no estoy segura, creo que sí. Hasta ahora resulta buena. No he encontrado camping en Nicaragua, pero un hotel como el que estoy hoy, lindo, limpio, con anfitriones amables, educados, cuesta 100 córdobas, menos de 5 dólares… o sea… que qué más podría pedir, si el viaje de esta vida o la vida que es este viaje continúan de esta manera, esto es en serio un sueño y yo que creí estar despierta…
Aquí van algunas fotos, algunas de Matagalpa, un poco más populosa que Jutiaga. Con el hijo de Ángela, Steven y su amigo Jonathan, otras del centro de las dos ciudades -están mezcladas- y millones de abrazosssssssss… desde Jutiaga, la ciudad de las brumas (dicen que dentro de un rato, el cielo se cae con la tarde y hará mucho frío aunque ahora parezca increíble. Así funciona por acá lo que a simple vista parece inconcebible)
Esta mañana fui al comité departamental del Frente Sandinista donde la señora María me había prometido que ella me llevaría una bandera del FSLN para Farid. Ahí estaba. Misteriosamente doblada y pculta en una bolsita. -No la saques- me dijo en voz baja, -acá todos quieren y se agotan…
Di una vuelta por el centro de Estelí. La ciudad nicaragüense del muralismo. Inscripta en el libro Guiness por haberse elaborado allí el mural más grande del mundo. Es triste partir de Estelí. La pasé tan bien… no es que la ciudad sea un encanto… una de esas postales del lugar soñado con farolas, flores en los canteros y casitas de colores. El encanto lo pone la gente, el movimiento, las voces, el desparpajo de colores, la música de la calle, el olor de braseros y frutas, la charla, la sonrisa. Tomé mates con Pancho y Elena y me fui retrasando, aletargando la partida hasta que al final, partí. Venía en la ruta, escuchando en la radio a los productores de café de la zona, trabajan en cooperativas y están recibiendo, traído por el gobierno, capacitación de especialistas brasileños en café. Son tantas cosas… que yo pensaba en que esto que siempre pensamos los que pensamos como pensamos, en esto que siempre y tanto nos repetían que era muy «idealista», al punto de llevarnos casi a dudar de si ese «idealismo» con el que venimos cumpliendo años y seguimos cumpliéndolos (sin sentar cabeza), sería viable alguna vez o sería una quimera. Estar acá, me pone delante de los ojos, en los oídos, que no es una quimera. Pensar como pensamos no es solamente caminar hacia la utopía y seguir caminando, es poder concretar logros durante ese camino y es realizable, hoy soy testigo, todo el tiempo, en este país, de que se está trabajando por ese «idealismo» que es revolucionario porque se rebela contra un orden económico mundial que pretende a través del poder del dinero mantenerse en boga, sin embargo pende de un hilo. Me preguntaba cómo llega Nicaragua, además de haber padecido años de guerra, a llevar a cabo esta instancia de proceso de realización. Es que de esa pobreza que provocaba la desigualdad en la distribuciíon de los recursos, de esa pobreza mayoritaria, y de ese enorme dolor y herida que les dejó la guerra, organizarse para una vida más justa y equitativa para todos no implicaba prácticamente nada que perder para nadie. Y acá está la gente, gente que sabe de todo, que habla, se comunica, participa, se moviliza. A mí este pueblo me conmueve.
Estoy en Matagalpa. Comí unas güirilas, tortillas de maiz tierno con nata… mmm… qué rico. También unas rosquillas. Todo rico y barato. Estoy en un hotel muy lindo, charlando para seguir apegándome a la costumbre, con Ángela, la encargada del lugar. Mañana partiré a una finca donde producen y elaboran café y de ahí, a seguir, a seguir descubriendo Nicaragua y el quehacer de sus maravillosos «nicas».
(No es posible subir más fotos esta tardecita… las agrego mañana o pasado… todo muy lindo la verdad, verdad, de la buena.)
Y sí, sigo en Estelí, y de pura cháchara. Ahora se me hace tarde, tarde no sé para qué, pero en todas partes me quedo charlando. La gente a mí me resulta normal, o sea que si a mí me resultan normales es porque deben ser todos locos como yo.
Hoy caminé hacia un cerro donde hay una cascada, se llama la Estenzuela, muy lindo el camino, subida, subida y subida, buen ejercicio, a 6 km del centro. Estuve un rato con las patas en remojo en el río (fijensé en la foto, junto al pie izquierdo, un pez.. o un cangrejo…) y disfrutando de la bruma de la caída de agua, del aire, del olor de las plantas, del sonido. No andaba mucha gente. Un tipo al que se le había quedado el auto, otros que lo iban a ayudar con un camión. La gente amable y los hombres respetuosos, algunos dicen algo, pero no se zarpan. En Honduras, eran bastante pesados y groseros. Otra cosa, que noto, diferente, acá, en Nicaragua hay mujeres en la vida pública, mujeres solas en auto, o en la calle, en Honduras no me encontraba con mujeres en la carretera, a veces en la gasolinera atendía una mujer, pero no andaban manejando ni en los hoteles en que paré, sólo hombres que andarían de paso. Bueno acá todo es más unisex y más mixto. Antes de llegarme a la Estenzuela me di una vueltita por el mercado desbordante de frutas y verduras inyectadas con siliconas naturales de sol, calor y humedad y no transgénicas, con el color propio y el olor de la tierra fresca, recién salidas del barro o de la rama, un olor especial el del mercado.
La comida me resulta rica y barata, una empanada 5 Córdobas, una bolsa de frutas surtidas 7 Córdobas…
Después de disfrutar de los aires frescos de la cascada encaré el regreso de bajada y a mitad de camino se me sumó una chica, Mayra, y después otra, «así nos acompañamos» -dijeron- y charlamos. Bárbaras las dos, me contaron de sus vidas, tienen una vida propia, tienen hijos, trabajan, quieren viajar, tienen proyectos, hablan de los padres, de lo sacrificado que fue para ellos sacarlas adelante de cómo es ahora, discuten, me entero. En 12 años de guerra hubo más educación y progreso que en 16 años de neoliberalismo, en 16 años de neoliberalismo no se hizo ni se construyó ni un solo plan de viviendas ni una sola escuela. Me encanta enterarme. Nadie parece estar del otro lado.
Llego a la casa y Aura, la hija de Cándida, la señora que limpia el hostal, que me espera preparando el mate. Luego Aura me da un show -ella con mis ojotas-, me canta una canción, tiene 5 años y hace ademanes como si estuviera en un escenario y baila. Charlo con Cándida, charlo con Pancho y Elena, los dueños del hostal «Tomabu» (lo recomiendo para los que pasen por Estelí, está en la Av Central, pronto tendrán página web) que se conocen todo, que saben de todo, que conocen el mapa de centromaérica como la palma de su mano, que han viajado y vivido en Nicaragua desde que nacieron hace más de 40 y pico de años. Charlo, tomamo mates y me tardo, me entretengo, me tardo, me quedo, me gusta.
Me voy al centro, a la librería Rubén Darío, es grandísima! Farid quiere una bandera del FSLN y me dijeron las chicas que conocí en el camino desde la cascada que ahí pueden tener. No les quedan más, sólo pequeñas, pero paso por el comité del FSLN donde estuve ayer. Charlo, otra vez charlo (esto parece Cuba), dos horas con las mujeres que me cuentan de sus hermanos caídos en la guerra, que opinan y discuten sobre lo que pasa en Honduras. Tienen como 60 años y están al tanto de todo y mañana, una de ellas, me va a llevar su propia bandera para que viaje conmigo y de regalo para Farid. Es increíble. No dan ganas de irse. Acá me gustaría quedarme, hacer algo, aportar algo, pero Nicaragua recién empieza, Estelí es mi primer amarre a Nicaragua. Me gusta, iré a ver qué pasa más adelante.
Estoy feliz compañeros de utopías, vivir para cambiar el mundo vale la pena y hay gente que está en camino aunque algunos no lo muestren y otros no se interesen por verlo, acá se siente que el pueblo está vivo y que no es más que eso, un pueblo, con su cotidianeidad, con sus penas y alegrías pequeñas y diarias pero VIVO.
Y como si fuera poco hablan de «vos», vos mirá, vos venís, vos querés… y se puede tomar agua de la canisssssshhhhhhaaaaaaa!!!!!!
Estoy emocionada, desde que llegué parece que hubiera traspuesto las puertas de un cementerio o antro de momificación. Nicaragua está VIVA. Lo de Honduras es muy triste. Hay gente en la resistencia, ahí la vemos, la gente sigue reuniéndose tantos días después, desde el 28 de junio!!!Pero hay situaciones insoportables y capaces de asquear a cualquiera con dos gramos de cerebro como escuchar decir anoche, en la Tv, a un periodista, que Chávez quería hacerle a Honduras lo mismo que le está haciendo a América del Sur, que ayer, Chávez, dejó sin luz a Brasil. Qué tendrá que ver??!! Es repugante con qué liviandad mienten, relacionan cualquier cosa con cualquier cosa, tejen historias truculentas y la gente común, lejos de intentar ver más allá, abrirse un poco la cabeza, por curiosidad, por dignidad, se queda en el molde, como si nada. No es todo el pueblo hondureño así, hay una minoría luchando contra la corriente y debo decir que tuve el agrado de leer las columnas del diario El Tiempo, donde algunos pensadores se juegan con verdaderas reflexiones.
Esta mañana dejé Honduras. En el borde fronterizo se vienen al humo. Quieren sacar plata. Ayudarte a hacer el trámite desde antes de llegar a la fronteras ya te empiezan a perseguir y a intentar pararte. Ya no me paran. Sólo si se identifiocan, si están uniformados, yo sigo de largo hasta las oficinas. Están las oficinas de migraciones y de aduana y no puede ser tan complicado hacerlo uno solo, para eso están ahí los empleados. Sin embargo a veces es engorroso porque los que trabajan en las oficinas están prendidos en la mordida y entonces no atienden en las ventanillas, se quedan adentro leyendo el el diario. Yo me mando, por la puerta. Buenos días, buenos días… voy a salir de Honduras y a entrar en Nicaragua, con mi carro. Por favor, me descarga el permiso de entrada del carro?? Y me sellan la salida en el pasaporte…?
Aquellos que planeen travesías de ida y vuelta por América Latina, sobre todo hablo por Honduras (hasta el momento), no les conviene cuando entran y salen por primera vez descargar el permiso aduanal del vehículo, si pueden evitarlo… les sirve para el regreso siempre y cuando esté en los términos de fechas. Es lo que hice yo. Vine en agosto, tenía permiso hasta noviembre, pero en el medio me fui a Guanajuato y cuando me fui, me hice la boluda y me llevé el permiso, no lo descargué, por eso ahora cuando regresé, ahí estaba escrito que mi permiso, estaba en mi poder y estaba vigente. Hoy al final descargué el permiso, pero el hombre de migraciones de Honduras no estaba. Así que seguí de largo hasta el siguiente puesto de oficinas donde me dijeron que había uno. Lo tuve que esperar. Nicaragua desde su ventanilla ostentando retrato de Sandino se preguntaba dónde estaba Honduras…? Dónde estará Honduras…? Habrá que preguntar a Estados Unidos. Honduras no sabe dónde está, vive este período en la sombra generalizada y la pelotudez. Mi abrazo a la resistencia, su labor y constancia es admirable inmersa en ambiente de tal apatía. Admirable.
Al final apareció el hombre de Honduras, me quería cobrar los 3 dólares de la entada otra vez. Le dije que no. Que ya estaban pagados, que ahí estaba el papelito abrochado, que se fije y que yo sabía que se paga una sola vez. En Nicaragua me cobraron 7 dólares, son dos pagos, uno de 2 y uno de 5 dólares. La moneda nicaragüense se llama Córdoba, 1 u$d = 20,20 Córdobas.
El permiso de aduana me lo hicieron con rapidez, eficiencia y es gratis, no se paga. Ya de entrada, ahí, en la oficina de aduanas me encantó porque había tres tipos en sus computadoras y apenas supieron que era argentina me dieron cátedra del Che.
Encaré feliz y chocha de la vida pero ups! La policía! Antes de que pudiera avanzar más de cien metros la poli de Nicaragua que tiene que revisar el auto, me sacaron todo y por poco no lo desarman. El poli que me paró estaba de civil así que al principio no le hice caso, se ve en una foto de remera marrón queriéndose meter adentro de la puerta. Miraron hasta el útlimo hueco. Me preguntó para qué llevaba el gas pimienta y le dije que para defensa personal en caso de necesitarlo. Me dijo que en Nicaragua las mujeres son muy respetadas y que estaba seguro que en su país no lo necesitaría. Al final me pidió disculpas pero me dijo que tenían orden de revisar todos los autos con placa de México, la puta, no había pensado en ese detalle. Ayer en esa frontera de Las Manos encontraron un auto de México con 685 kg de cocaína.
Llegué a Estelí. Sandino está en cada rincón de la ciudad, la bandera del FSLN también. El hotel donde estoy es barato y precioso, entré el coche, el cuarto es lindo y hasta tiene una mesa que da a una ventana donde me puedo sentar a escribir. Charlé con Pancho, el dueño del hotel, tomamos mates, hablamos de política, me contó de la larga dioctadura y de la guerra, está queriendo ampliar con otras personas de la ciudad el museo de Estelí. Que ya nos dejen de joder los yanquis, aquí el pueblo es el que manda y les guste o no, es nuestro pueblo, son sus palabras. Comí un vaho, una especie de puchero, hecho en un brasero en la esquina, con una mezcla de grasitas animales hervidas, yucas, plátanos, rico y nutritivo. Todo parece ser bastante barato. El vaho 30 Córdobas, unas mandarinas 9 Córdobas… Me fui a la galería de héroes y mártires de Estelí y cuando entré y vi todas esas fotos, esas caras, esa gente, me puse a llorar. Me emocionó. Este pueblo tiene historia y MEMORIA.
Estoy en mi salsa compañeros de utopías, creo que acá voy a quedarme un poco más.
Yo sigo buscando. Hablando con la gente. Anoche me quedé un rato tomando mates con Ana y Dalia, las chicas del hotel de Maru en Comayagua. Dalia es la empleada, la esclava. Ana es la que le grita: -Daliaaaaaaaa, dónde están las calcetas negrassss??? Y ahora planchame la falda azul, Daliaaaaaaaaaaa!!!! Dalia sabe de Mel y Ana solamente habla de su novio y de la novela y del casamiento y de las relaciones cotidianas. Lo fundamental está solucionado, su familia es dueña del hotel. Ana tiene 25 años y Dalia 17. Dalia tiene cara de dalia. Es preciosa, y le gustó tanto el mate que le regalé un poco de yerba para que se haga mate cosido hasta tanto consiga más y una bombilla. Salí de Comayagua esta mañana, luego de volver al parque central a tomarle una foto al reloj de la catedral ya que resultó ser uno de los más antiguos del mundo. Forjado por los moros hace más de 800 años en La Alhambra y donado después por Felipe III a la capitanía de Comayagua. Si pueden ver, el número 4 en romano está escrito de la manera más antigua: IIII en lugar de IV. Me di una vueltita más, pasé por el barrio de La Merced, también uno de los más antiguos de la ciudad y hablé con los diarieros. Los diareros dicen que si Mel no es restituido, la democracia y las elecciones son una burla y me dieron un diario El Tiempo, dicen que El Heraldo se vende, pero lo escriben según los intereses de los empresarios y los dueños de los medios. Ellos no van a votar. Pero la mayoría seguramente irá y la clase gobernante, ese grupejo seguirá haciendo la suya con total impunidad o barriendo al que moleste. El grupejo se cree dueño de todo, se maneja como tal, y la gente está bastante atontada. Repiten lo que dice la Tv, «a ese revoltoso -refiriéndose a Zelaya- ya lo sacamos», tal y como lo dicen los canales que repiten a Tinelli y a otros programas de variedades internacionales que les resultan entretenidos y los emboban. Hay dos radios que no se acoplan y resisten, Radio Globo y Radio América y UN SOLO CANAL de TV entre más de OCHENTA! O se que, VIVA LA PEPA! Engrané y arranqué. La ruta, un suplicio. Desde hace más de dos meses, que estuve acá, y la están reparando siempre, por lo que hay tramos donde hay que estar parado durante una hora para que pasen del otro lado o pasen las máquinas. Igual hay rutas buenas y otras llenas de pozos, yo pienso y desconfío, las hacen así no más, los funcionarios de Michelleti tienen amiguitos en empresas de construcción e ingeniería civil, emparejan el terreno y como llueve mucho en esta zona, cuando la tormenta arrecia, otra vez se rompe todo. Es común que haya zona de fallas, donde de golpe se abre un boquete y la ruta se hundió. Llegué a Tegucigalpa y me tentó entrar a la embajada de Brasil pero antes hay tantos retenes de milicos que desistí y seguí de largo. Los milicos no me pararon, me paró la policía y me pidieron la licencia, me preguntaron cómo eran los pesos mexicanos, lamentablemente no llevo ninguno cariñito, así que no te los puedo mostrar, mucho menos darte un par… querías uno, no?? Si querés te convido un matecito, le dije al poli… necesitás algo más?? No. Y me fui. La entrada al Parque Nacional la Tigra que supuestamente está por Tegus, cerca de Jutiapa, no la vi así que seguí. Camino a Danlí. Encaré para entrar en San Antonio Oriente, cuna del pintor primitivista José Velázquez, la carreterita era de tierra y estaba muy pozeada, eran solamente 6 km y medio pero me dije, pobre auta, bancarse esto de ida y vuelta más lo que falta para llegar a Danlí… así que también dejé a Velázquez para cuando haga el viaje en el jeep amarillo petitero. Llegué a Danlí, se acuerdan? Tanta veces nombrada cuando Zellaya llegó a la frontera con Nicaragua. Un poco más adelante de Danlí está el Paraíso y después la frontera que me espera para mañana y de la que no tengo ni idea, estaré hasta Las Manos, se llama Las Manos, a ver cómo son los nicaragüenses en la frontera. Ahora en Danlí estoy en un hotel que se llama La Esperanza, que al final aunque uno le dé vueltas al camino es lo último que se pierde y está lindo. Está limpio, tengo Tv y la dueña mira a Maldonado, el de Radio Globo y me dijo que lo que pasa en Honduras es una vergüenza a los ojos del mundo entero y que en Tegus ya se matan como si nada, porque justamente, llegando acá, habían encontrado asesinado al hermano del ex presidente Callejas. En el diario que me dieron los diarieros, durante un embotellamiento, alcancé a leer que aparecieron varios cadáveres. Gente que se llevan los uniformados, dicen que son policías, después los encuentran por ahí, amarrados y muertos, y la policía dice que ellos no fueron. Horrible, fuera de control, y a casi nadie parece morderle si quiera la curiosidad por saber qué es lo que está pasando. Tengo una cita con el mapa y la Lonely Planet, capítulo Nicaragua. En breve les cuento… Abrazossss…
Fui hasta La Esperanza pero no me gustó. Es un pueblo dónde según dicen las informaciones se mantienen algunas tradiciones de comunidades aborígenes lencas.
Fue que después de conducir por una carretera que en tramos estaba en reparación y había largaaas colas, entré a un camino bello, de esos de montañas puramente verdes y exhuberantes. Muy lindo. Imaginé que el pueblo me gustaría porque en los carteles versaba… «aquí comienza la ruta colonial y de los volcanes». Me ilusioné al pedo. Llegando hacía frío y viento. Eso me lo habían anticipado, es una de las sierras más altas de entre las honduras. Sin embargo no fue por eso, ya que llevo mi abrigo de duende y no me acobarda el frío, fue en parte el antipático del hotel, el precio del cuarto que exedía mi presupuesto. Ya he hablado de esto en otras oportunidades y sí el presupuesto es magro, pero se consigue y de buen aspecto. Ya ven. Anoche por ejemplo en D & D todo fue super fenomenal y entre comida y dormida y ducha y excelente compañía y buenos momentos no gasté más de 10 dólares. Fue a lo mejor una exepción, porque sí fue excepcional.Ahora el tipito de La Esperanza me quería cobrar como 350 lempiras que son casi 20 dólares y está en pedo, el hotel ni valía la mitad. Las calles estaban mojadas, encharcadas, pozeadas y rotas. Me fui al carajo.
Eso significó, primero encarar otra ruta, al cabo de pocos kilómetros era de tierra. Así que otra vez, media vuelta, march, pa’tras. Hay que seguir algún consejo del «dolape» que algo de fierros sabe y dice que si ando en terrenos escabrosos no sé qué cazzo se me va a romper.
En fin, me volví 100km y encaré el rumbo a Tegucigalpa con la idea de entrar en Comayagua que tantas veces se escucha gente que llama a Radio Globo.
Acá estoy. Es una ciudad agradable, pero a esta hora, serán las 6 de la tarde ya casi todo está cerrado. Ebncontré un hotelito bastrante como la gente y una covhera, todo suma menos de 10 dólares. Perfecto! Ya anduve caminando por ahí y me compré para hacerme unos sánguches de jamón y queso.
Las chicas que regentean el hotelito parecen copadas y simpáticas. Después charlaré ahí un ratito con ellas.
Acá, no pasa nada.
Siento que cuando hablo con la gente, les pregunto algo, como si hbalara otro idioma, no me entienden. En general no parece haber mucho interés por nada. Como la otra vez… hace dos meses… la misma sensación, una confusión por un lago, un desinterés por otro, y en medio, escucho la radio y cada Pepe, lobizón o goriletti, siguen con su campaña como si nada.
Van abrazos y mañana no sé…
Hay un parque nacional cerca de Tegusigalpa. Si no es complicado me mando un día por ahí y si no… tengo que consultar con el mapa, pero ya ando con ganas de visitar al camarada Dani.
Van algunas fotos con retraso de ayer, de Lago Yojoa y el lugar donde dormí, colchón de aire, colección de piezas precolombina de Bob, fotos de flores exóticas, bromelias, plantas para escurrir shampoo, herbal essence al natural y a la mano y también de la ruta de hoy donde cuando esperábamos unos nenitos vinieronb a charlar y de paso tomarse unos matecitos conmigo.
Anoche probe cerveza de rash berry (no se que es ni como se escribe) y de albaricoque, exquisita!!! El senior Bob me puso un colchon de aire en una habitacion de la casa porque llovia mucho. Hubo guitarreada, bastante blusero el tema, con trompeta, y cantamos algun que otro tradicional chamame ya que esta mujer argentina, Magali, es de Entre Rios.
Todavia estoy aca, sin enies ni acentos. Hay una multitud incalculable de variedad de aves.
Estuve hablando con las chicas que trabajan aca, me dicen que al parecer Zelaya desiste de continuar con el infructuoso dialogo por su restitucion.
En un par de horas saldre hacia La Esperanza o Gracias que era la antigua capital Hondurenia, dos poblados donde quizas pueda integrarme mas a la vida comunitaria, aunque la verdad, la naturaleza en estas latitudes es un lujo, no tiene desperdcio y es muy hermoso el panorama, ademas de sentirme bien tratada por esta gente.
A ver si subo unas fotitos…
Hay de Rio Dulce, de mis incursiones en la alberca y las hamacas paraguayas de la Hacienda Tijax y luego del camino, como siempre en el camino, y de este lugar. (en facebook hay algunas mas)
Hola a todos!! Hoy les debo las fotos y los acentos… estoy en la computadora que me presta un gringo, en Honduras, tomando mates con una argentina que se llama Magali que anda trabajando por diferentes lugares, que huyo con su familia durante la dictadura hacia el norte y que estuvo viviendo varios anios en Caracas por lo que me va a dar contactos y me dice que seguro puedo conseguir laburo en Venezuela. Me va a pasar informacion. Tampoco hay enies, se entiende no Sali esta maniana de Rio Dulce todo bien. Cruce la frontera. Me pararon, me querian hacer creer que el pemirso ya no servia, a mamita, querido. Carinio, le dije al tipito, ahi dice hasata el 20 de noviembre y es el permiso de este carro asi que sirve o sirve y pim pum pan pase como chifle, migraciones y me fui a Omoa a la costa atlantica pero no me gusto el lugar para quedarme asi que segui y llegue a este Lago a un tal D&D bed and breakfast, el tipo hace cerveza, me estuvo enseniando acerca de las plantas que tiene por aca, sabian que las begonias se comen y tienen vitamina C…. pues ya me comi una y hay unas plantas con la que los indigenas hacen su shampoo y unas orquideas increibles y la flor mas grande del mundo, maniana o pasado pongo fotos. Como estan encantados con la historia del viaje, el hombre este, que ademas es musico, toca la guitarra, me ensenio lugares bajo techo para que arme la carpa y tengo canilla libre de agua caliente y potable para el mate. Todo bien. Pronto sigo mis gentes. No quiero usar mucho esta compu y esto esta medio aislado de los pueblos, pero no es ripio, jeje, las rutas en Honduras estan buenas. Abrazosssssss
Salí de Cobán por GuateBonita y con la idea de acampar en el Biotopo del Quetzal, zona de reserva ecológica que se conoce como región del bosque nuboso. Es una zona preciosa, verde, serrana, húmeda y con vegetación abundante y exótica, cascadas y mantiales por doquier.
Llegué rápido, en menos de dos horas desde Cobán ya estaba en la reserva. Dejé el coche en el estacionamiento y empecé a caminar por los senderos. Lloviznaba, pero esta vez mi deseo no era engañoso, el cielo se estaba poniendo clarito.
Pensé en quedarme ahí. Estaba bueno. Junto a cada espacio de acampe una mesita con sus bancas de madera, una parrilla y una palapa. Sin embargo, qué sé yo, no me quedé. Pensé en llegar un poco más adelante a otro lugar recomendado también en Lonely Planet, cerca de Salamá, un centro turístico con alberca y palapas y allá fui.
Llegué al centro turístico llamado Las Orquídeas y no me gutó, era una especie de parque de diversiones con toboganes de agua y albercas y un restaurante, nada de playa, parque, o espacio acogedor para acampar.
En ninguno de estos dos lugares había nadie, salvo los boy scouts en el primero y unos chicos jugando en las albercas en el segundo.
Qué hacer? Me pregunté y le pregunté al mapa. Sorbí un mate. El ruidito parece que responde. Adelante. A seguir la ruta. A Río Dulce. Pegué la vuelta de Salamá. Deshice unos kilómetros, no eran muchos, iba mirando si había algún lugar más copado por ahí. Llegué al entronque y encaré la ruta que decía Puerto Barrios.
El paisaje cambió, se fue achaparrando junto con la vegetación que durante un tramo se volvió agreste y espinosa para reverdecer de nuevo una hora y media después de camino.
En totalfueron unos 380km.No puse gasolina. El tanque seguíalleno.La gasolina de GuateBonita es GuateBuena, rinde más que la mexicana.
La carretera conduce derechito al Puerto Barrios donde el Lago Izabal y el río Dulce se encuentran con el Océano Atlántico, en Guatemala, y lindando con Belice, la cola de camiones era interminable. La ruta no es doble así que debía ir despacio y con mucho cuidado al intentar rebasar la hilera de containers.
Llegué a Río Dulce cuando ya había oscurecido, con la ventanilla abierta -trato de no usar el aire acondicionado para no forzar el motorcito de la colorada- calor y sin lluvia. Crucé el puente de lado a lado del río Dulce y empecé a prestar atención a los carteles para llegar al camping Hacienda Tijax que recomendaba Lonely Planet. Según decía estaba a 1 km alejándose de la carretera. Y allá me adentré, en la espesura selvática alimentada sin reticencias por del cauce generoso del río. No se veía ni lo que se hablaba en una especie de sendero campestre rodeado de jungla… y de río.
Al final llegué al parking de la hacienda, pero de la hacienda y del camping ni mu. No se veía nada. En la entrada, un hombrecito me había dicho que ahí debía dejar el carro y subir caminando unos tres minutos por unos puentes.
Encontré el puente, colgante y tembloroso, pero no me animé a seguir, así que pegué la vuelta y decidí buscar un hospedaje más al centro.
Llegué a la entrada de la hacienda, donde estaba el hombrecito otra vez, quien se ofreció a guiarme en bicicleta. Fuimos hasta otra casa, llamada La Finca y desde ahí, alguien, «el patrón» -dijo el hombrecito de la bicicleta- llamó por radio al guardia del camping para que me fuera a esperar a la entrada de los puentes, pasarelas, colgantes y temblorosos.
El lugar resultó ser precioso. No hay camping ya, son cabañitas conectadas por mulles y senderos, en medio de la jungla y sobre las aguas libres de las orillas del río Dulce.
Cuando llegué, la muchacha de la oficina-recepción me dijo que eran 160 quetzales, lo que excede sobremanera mi reducido presupuesto que debo cuidar a rajatabla si es que no quiero ponerme a tirar las cartas en la plaza del pueblo a voluntad y por lo que guste coolaborar. Todavía lo voy haciendo con elahorrito, así que le dije a la muchacha que no, que era muy caro y que buscaría algo en el centro del pueblo. Enseguida me bajó a 60! Eso ya era otra cosa, claro que debo compartir la habitación con una pareja de murciélagos -verán uno en una foto de la pared del cuarto- y el baño con un francés o candiese guapo pero babososo. El baño está lindo, está limpio y amplio y la cama está rodeada de un mosquitero pesado, grueso y consitente con lo que los murciélagos verán burladas sus intenciones de violar mi intimidad y convertirme en vampiresa.
El resto del lugar es un paraíso. El pueblo o centro tiene aires amazónicos, iquiteños, pero con un aire un poco más fresco. Es desorganizado, ruidoso y colorido. Me acabo de comer una ensalada de frutas con sal y algo parecido a polvo de cacahuates. Extraño pero rico. Y ahora de camino a la hacienda compraré algo más de alimento ya que por este lado es más barato.
Vuelvo a la paz de la hacienda. A tomar unos mates con el río. Amo el agua inquieta. Ayer, mientras venía en la ruta trataba de calibrar mi alegría, para no pecar de un exceso, y desée compartirla con alguien más, tener a alguien al lado para poder mostrarle o ver juntos. Quiero ver y quiero dar a ver, quiero aprender de la gente, reflexionar sobre sus modos de vida, sobre sus quehaceres, sus sabores, y sus necesidades. Y quisiera que otros con los mismos intereses pudieran estar conmigo o hacerlo por su lado, pero no dejar de hacerlo.
Quizás mañana me encuentre en una nueva frontera, por el Corinto y rumbo a Honduras. Otra vez Honduras, a ver cómo va la cosa por allá.
Aquí algunas imágenes de Cobán. La variedad floral es bellísima. Bastante exótica. La ciudad es resumida y sencilla. No es gran cosa pero está en medio de lugares que prometen ser más interesantes que la ciudad en sí. De todas maneras es lo típico, la gente de GuateBonita en las calles vendiendo sus elotes de todos colores desde el amarillo a el rojo como coral, elotes azules y violetas, largos y asaditos a la leña y mucha fruta. Y ahí nomás, pegadito, el puesto de Empanadas Argentinas. Dice la señora que las vende que el dueño es jugador de fútblo, que juega y vive por acá y que él las hace. La masa, buenísima! El relleno es de pollo, está bueno, pero claro,l no es esa carnecita con juguito que chorriiiaaa. Lo que sigue chorrriiiiando es el cielo. Todavía llovizna. Me garúa finito.
Escuché en las noticias que es un temporal, las tormentas tropicales y ya pasará y todo lo que se moja se tiene que secar aunque después se moje de nuevo. No importa.
Ya me tomé unos mates y vine al ciber. Vine a dejar un mensaje breve.
Parto al Biotopo del Quetzal, es una zona ecológica, cerca de acá, a dos horas más o menos, pero no creo que haya conexión a internet, así que si no aparezco en un par de días no se preocupen, luego les llegará el aluvión de noticias. Espero que lahumedad del terreno permita armar la carpita y que en un par de días sonría el sol y castigue para deshollinar el moho.
Abrazosssss a todos, me encanta recibir sus comentarios, preguntas y otras yerbas.