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En Bicicleta de los Pirineos a los Apeninos-Día 8: Rieux Volvestre-Mirepoix

Desde la Garonne pedaleamos una linda ruta, con arboleda y algunos desniveles agradables.

Fuimos por los caminos sencillos y rurales que pasan por Mailhots, Latrape, Castagnac, Saint Ybars, Villeneuve de Latou, hasta Pamiers. Pamiers parece una comunidad de la Europa colonial por sus callejuelas adoquinadas, sus construcciones, y su gente.

Nos comimos una enorme pizza por 8.90 euros y tomamos un refrescante jugo de menta y limón, granizado de hielo. Estupendo.

Por aquellos lares, en Foix, andaba el tour de France, así que no faltaban los que nos preguntaran si veníamos de allí.

Luego de toda esta parte tranquila nos tocó una ruta con muchos autos. Intentamos evadirla pero terminamos adentro de un maizal embarrado. Empujando la bici a través del campo, cerca de Saint Amadou nos encontramos con unos boyscouts que andaban más perdidos que nosotras.

 

Al final, para evitar más vueltas y barro, no nos quedó más remedio que volver a la carretera transitada. Por ella llegamos hasta Mirepoix, una ciudadela medieval con encanto y donde justo se celebraba un festival. La plaza y las recovas estaban llenas de música y gladiadores. La gente andaba vestida como en la época de los juglares, tocaban instrumentos antiguos, bailaban y participaban de competencias de tiro con arco.

En Bicicleta de los Pirineos a los Apeninos-Día 7: Boulogne sur Gesse-Rieux Volvestre

En Boulogne sur Gesse que es una población un poquito más populosa, un pueblo, pero algo más comercial, hicimos acopio de vituallas. Salimos tranquilas, casi a mediodía con las alforjas repletas.

Fue una ruta de subidas leves y bajadas pronunciadas, largas y delicios. Atravesamos enormes extensiones desoladas de campos de girasoles, muchos ya cosechados, y pasto dorado enfardado. Los pueblos también, desolados. Pueblos enteros dormidos. El silencio total. Radiante. Mucho sol, mucho calor. El ambiente es rural, y a esta hora, la siesta.

Pasamos por los pueblos de Ciadoux, Casagnabère Tournas, Esparron -siguiendo una vía verde-, Benque, Montoussin y seguimos los letreros hacia Le Fousseret. Luego entramos a una ruta angosta hacia Saint Elix le Chateau pero la dejamos pronto para ir en dirección Saint Julien Garonne. Cruzamos el río Garonne que atraviesa toda Francia y acampamos en Rieux Volvestre, junto al río, en Plan de l’eau.

 

Pirenaica 8-Otsagabia-Isaba-Refugio de Belagua

Desde Otsagabia tomamos el GR 11 directo a Isaba.

El camino por el GR 11 es muy sencillo. Transcurre por una pista ancha de ripio. Bastante incómoda para caminar y monótona.

Los árboles constantes ayudan con su sombra. Se pasa por un estanque de agua estancada marrón, como para remojarse los pies.

Después de este estanque el camino se transforma al fin en un sendero más acogedor. Con menos sombra pero donde corre un aire muy agradable. La bajada final al encantador pueblo de Isaba es empinadísima.

Son 600 metros de desnivel en 3 kilómetros. Por suerte por un lecho de hojas secas y a través de un bosque denso con sombra.

Al llegar a Isaba enseguida se destaca la iglesia del año 1500 con forma de fortificación y las construcciones medievales.

Damos unas vueltas por las callejuelas del pueblo y subimos al refugio de Belagua donde vamos a dormir en el camping que nos costó 5.50 euros. El personal es amable y la ducha de calentador eléctrico así que si hay mucha gente en el camping se recomienda no papar moscas e ir a bañarse cuanto antes.

Pirenaica 7-Chalet de Pedro-Irati-Pic d’Ori-Otsagabia

Una etapa con mucha subida y poca agua. Hay una tienda de alimentos al inicio de la caminata.

Salimos del Chalet de Pedro rumbo a los Chalets de Irati. Pasamos por la presa de Bargakiak donde hay agua. Es un paraje pintoresco. Luego, en el barrio de los Chalets de Irati hay tiendas donde reabastecer algún alimento. Los precios son variados. Hay algo económico que se puede comprar aunque en general es bastante caro.

Tomamos la senda GR 10 T (transfrontière). Casi toda la etapa en subida por las faldas del Bizkarze y luego por Zazpigana hasta superar el Pic d’Ori de 2021 metros. Las vistas son espectaculares.

Atravesamos bosques de hayas y pinos y bajamos al puerto de Larrau. Habíamos leído que cerca de esta pista encontraríamos un refugio y una fuente de agua, un arroyo. Arremetimos algunas cimas y collados más pero no encontramos el arroyo. La tormenta y la tardecita caían sobre nuestras cabezas por lo que no dudamos en hacer dedo al primer coche que pasó y terminamos en Otsagabia.

En Otsagabia hay un camping. No conocíamos así que estuvo bien llegar a este pueblo encantador. Además de conocer a una pareja super copada que fue las que nos llevó en auto hasta allí. Deberemos remontar las laderas nuevamente mañana y nos perdimos la Cabane d’Ardané porque fluyó hacia la vertiente sur.

En Otsagabia el camping nos costó 5.50 euros. Las duchas eran espectaculares y el personal muy amable.

Todavía estamos en el País Vasco. Euskal Herria.

 

Pirenaica 6-Refugio de Aspegi a Chalet de Pedro (Irati)

Un buen tirón con mucho desnivel, tanto de subida y trepada como de bajada. Hubo bastante niebla, factor habitual en Pirineos. Sobre los 1100 metros aclaraba. Por debajo era una nube inmensa.

Desde el Refugio de Azpegi tomamos un sendero local, el 57 B que pasa por algunos cromlechs. Este sendero está balizado con marcas verde y blanca y coincide con el GR 12. A su vez, el GR 12, durante toda la primera parte de esta jornada, coincide con el GR T 9. Los GR T son los senderos Transversales, balizados en las últimas décadas y que tienden a extender lazos entre el GR 10 (Francia) y el GR 11 (España) . Si hacemos la Transpirenaica por las alturas, la Alta Ruta, vamos a coincidir muchas veces con los GR T y con los senderos Locales como el 57 B. Con un mapa de papel se ve esto claramente y bastante fácil porque son senderos de muchos años que se van denominando y señalizando según colores, pero que ya existían.

Cuando termina el sendero local 57 B, nos metemos en un camino más ancho. La entrada a este camino no se ve, pero se encuentra justo donde se señala la finalización del sendero local. Hay marcas roja y blanca de GR que seguiremos. Flanquearemos una ladera muy vertical, expuesta pero que se puede cómodamente con precaución. Luego iremos sorteando varios collados, uno tras otro donde los postes marcan las alturas máximas y el nombre de cada cima. A medida que bajemos, nos meteremos en enormes y hermosos hayedos.

Cuando pasamos Okabe, casi al final de esta jornada, tomaremos el GR 10 por la derecha de Okabe. Si vamos a la izquierda, iremos hacia la misma carretera pero en dirección a Donibane Garazi (Saint Jean Pied de Port).

La bajada a Egurgi es empinada y tras ella, la bajada al Chalet de Pedro, donde acamparemos, también baja precipitosamente.

Acampar cerca del Chalet de Pedro, junto al río, es precioso, está permitido, y es gratis.

 

 

Pirenaica 5-Auritz (Burgete)-Orreaga (Roncesvalles)-Azpegi

(Para arrancar la etapa desde Orreaga -Roncesvalles- hay un autobús desde Iruña -Pamplona- de la empresa Autobuses Artieda. Demora 1 hora 10 minutos y cuesta 4.80 euros. Los horarios se pueden consultar por internet.)

En el pequeño poblado de Orreaga o Roncesvalles abundan los peregrinos del Camino de Santiago. Para empezar esta etapa pirenaica vamos hasta la Colegiata. La colegiata es un edificio enorme. Por detrás de ella sale nuestro camino. Al principio compartiremos el sendero con los peregrinos del Camino de Santiago. Podemos seguir las tradicionales flechas amarillas o las roja y blanca del GR. Siempre en ascenso llegaremos hasta el Collado de Lepoeder donde el viento y la niebla nos envuelven. Desde allí hacemos el descenso y nuestro camino pirenaico se separa del Camino de Santiago.

Seguimos la señalización que indica a Aspegi. La alambrada fronteriza nos señala el rumbo correcto. En varias oportunidades pasaremos a un lado y a otro de la misma.

Antes de llegar a Azpegi aparecen varias bifurcaciones. Los desvíos están bien señalizados. Hay varios senderos temáticos que conducen a restos megalíticos de la Edad de Bronce.

En Azpegi hay bordas pastoriles y pasa una carretera asfaltada. Bajando por esta carretera 400 metros encontraremos el Refugio de Aspegi que es un lugar estupendo para descansar. Se trata de un refugio abierto y gratuito. Precioso. Está bien mantenido. Limpio. Afuera hay un par de parrillas y una fuente. Adentro tiene hogar a leña, mesas y bancas de madera, y un entrepiso donde dormir cómodamente.

 

 

La vegetación alrededor es impresionante. Los árboles son tan altos y tupidos que, inmersos en la densa y frecuente niebla, uno sospecha que son montañas.

 

En Bicicleta de los Pirineos a los Apeninos-Día 6: Lourdes-Boulogne sur Gesse

Con las bicis recién aceitadas y nuestras piernas descansadas encaramos les Hautes Pyrénées coincidiendo en buena parte de nuestro camino con el trazado y el paso del Tour de France. La ruta a seguir sin rigidez, sino flexible a las veces que nos perdemos y no son pocas, la buscamos inicialmente en google maps y en un antiguo mapa de papel, o mejor dicho un pedazo de un mapa, que encontramos en el albergue de Saint Palais y que nos acompañará el resto del viaje. Un mapa de paPel, por experiencia, es siempre La  herramienta de orientación más útil en cualquier recodo del camino.

Este día pasamos por Lanne, emblemático punto para el ciclismo ya que desde aquí se inician los tradicionales ascensos del Tour de France y es puerta al ascenso mítico del Tourmalet. Se considera una de las etapas más difíciles del Tour de France ya que se ascienden y descienden siete puertos. Con mucha más tranquilidad que los competidores, mirando el paisaje y sacando fotos, nosotras también pedaleamos bastante este día.

Desde Lanne atravesamos los encantadores pueblos de Louey, Momères, Barbazan Debat, Bordes, Goudon, Bonnefont, Sentous y llegamos a Castelnau Magnoac donde pensábamos dormir. Dejamos atrás la Aquitania y entramos en Occitania. Esta ciudad: Castèthnau de Manhoac, en occitano gascón se encuentra en Midi Pyrénées, es la que tienen mayor población del cantón pero el único camping posible está alejado y es nudista. Todo bien, pero no tuvimos ganas de andar de carpa en carpa y de calentador y sopita en bolas, así que decidimos pedalear unoS kilómetros más hasta Boulogne sur Gesse, en occitano Bolonha de Gessa, también en el Midi Pyrénées.

Llegamos tarde a Boulgne y ya no encontramos lugar para comer comida, pero por suerte siempre llevamos unas sopitas salvadoras. El camping que encontramos es muy grande, con mucho espacio y arboleda y muy barato. El encargado fue muy atento, y también la gente que se estaba quedando allí. Nos trataron con amabilidad y generosidad, un acampante de caravana, nos facilitó el martillo ya que el suelo era duro para clavar estacas. Otro vecino, que estaba en un acabaña nos ofreció su calentador a gas porque nos vio en el super intentando comprar una garrafa y las que habían no sirven para la conección de nuestro calentador.

Stella durmió muy bien. Yo más o menos porque llovía mucho y cuando me levanté para ir al baño vi que la bici de Stellete no estaba. Pensé que se la habían robado. No me podía dormir, y cuando le fui a contar me dijo que ella la había cambiado de lugar para que no se le moje…

En Bicicleta de los Pirineos a los Apeninos-Día 5: Lourdes

Día de reparaciones. En Lourdes, ciudad muy visitada por su iglesia y virgen con fama de milagrosa, existe una bicicletería, les Clycles Arbes de Lourdes que hace milagros visibles, tangibles y comprobables. Si alguien pedalea por esta zona y anda con inconvenientes técnicos le conviene llegarse hasta aquí. La Cycles Arbes se encuentra en la carretera que sale de Lourdes hacia Tarbes sobre mano derecha y luego de pasar el supermercado Lidl.

Nuestras bicicletas, especialmente la mía, deberían pasar en ese hospital mecánico unas cuantas horas, más de la mitad del día, así que no nos quedó otro remedio que pasear por la ciudad.

Si bien la ciudad de Lourdes es ahora un santuario muy visitado, hasta 1858 era apenas una pequeña aldea con casas humildes, como así también sus habitantes, que en un ochenta por ciento eran analfabetos. Esta comarca se encuentra en el inicio del sistema montañoso de los Pirineos y tiene hacia el oeste un promontorio rocoso conocido con el nombre de Massabielle (Rocas Viejas). Al pie de éste corre el río Gave que se forma con las aguas que descienden de las montañas. A un lado de los muros de rocas seminegruzcas la naturaleza abrió una pronunciada gruta. En el suelo de esta gruta solitaria, árido y seco, crecían rosales silvestres, que eran las flores de la zona. Allí fue donde se le presentó a Bernadette Soubirous la virgen. Actualmente junto a esa gruta llamada Gruta de las revelaciones se alza un santuario que es lugar de peregrinación.

Paseamos todos el día por esta ciudad turística. Comimos pollo al spiedo con las manos sentadas en una plaza, postres de chocolate sin cucharitas y aprovechamos también a solucionar el problema del teléfono de Stellete que venía sin conexión a internet. Finalmente conectó y nos comunicamos con todo el mundo hacia todas las latitudes posibles.

Ya de tardecita recogimos nuestros móviles y bártulos. Las bicis salieron con mejoras imposibles para semejantes modelos antiguos, sin equipamiento profesional. Con todas estas diligencias realizadas buscamos otro camping para dormir dejando Lourdes atrás. Paramos a  en el Moulin de Monge. Este camping también está muy bien. Tiene un linda piscina, sauna, y una proveeduría muy bien provista y con precios muy accesibles.

 

En Bicicleta de los Pirineos a los Apeninos-Día 4: Oloron Sainte Marie-Poueyferré (Iparralde a Francia)

Desde Oloron Sainte Marie tomamos otra vez una ruta tranquila que nos llevó por los pueblos de Précilhon, Escout, Herrere, Buziet, Buzy, Bescat, Servignacq Meyracq y Rebenacq o Rebenako que nos impactó y sorprendió gratamente con su encanto. Descansamos sobre el puente del río Neez y luego remontamos la empinada calle de este pueblo de cuento.

Por más caminos rurales y con desnivel pasamos por Arros de Nay y luego fuimos a Nay. En Nay había bastante movimiento, ya no era un pueblito tranquilo sino una ciudad con tráfico, y se notaba que los ánimos estaban exaltados, quizás por la cercanía del Tour de France o alguna fiesta local ya que colgaban banderines a través de la plaza y las recovas y galerías del centro.

En muchas de las rutas, caminos, por los que vamos circulando, hay carteles que anuncian que en estas fechas cerrarán a determinados horarios dichas vías porque pasará por allí el tradicional tour de France. Esto ocurría a mediados de julio.

Desde Nay fuimos a Pontaq Lamarque donde pensábamos acampar, pero no había camping ni lugar con agua donde pudiéramos armar nuestras tiendas, así que seguimos un poco más hasta Poueyferré. Fue providencial ya que, aunque llegamos de tardecita y con el estómago que crujía, nos encontramos en el camping con la dedicada y deliciosa elaboración de las pizzas de Bea. Las pizzas resultaron suculentas y a buen precio, entre 5 y 6 euros. El camping costó 11.

El desviador delantero de mi bicicleta no funcionaba, quise repararlo y corté el alambre así que nos fuimos a dormir pensando que al día siguiente nos tocaría una jornada de apoyo mecánico en Lourdes, a pocos kilómetros de Poueyferré.

Continúa en Francia…

 

En Bicicleta de los Pirineos a los Apeninos-Día 3: Saint Palais-Oleron Sainte Marie (Iparralde)

Desde hace años quería conocer Maule o Mauleon Licharre, capital de la provincia de Zuberoa o Xiberua. Al fin llegué hasta allí, en bicicleta.

Me encantó con su castillo y sus amplias plazas rodeadas de otros edificios como la Mairie y plazas o simpáticos bares y restaurantes con gente cordial disfrutando el mediodía y los sabores vascos.

Seguimos por los caminos angostos, rurales, cruzando los pueblos pequeños y encantadores de Iparralde por su calle principal, de entrada a salida. Este día atravesamos Etcharry, Charrite de Bas, luego entramos a Maule. Cruzamos al otro lado del río por un antiguo puente y seguimos por más pueblos pequeños y rutas angostas hasta L’Hôpital Sainte Blaise y cerca de la autopista principal pero sin poner ni una rueda sobre ella, seguimos la agradable secuencia de Gueüs d’Oloron, Saint Goin y Orin hasta Oloron Sainte Marie.

En Oloron Sainte Marie acampamos en el camping municipal. Todos los campings están bien, tienen ducha de agua caliente, garantizado; internet en casi todos. En algunos campings hay lavadoras de ropa, y en la mayoría hay piletas para el lavado de vajilla con agua caliente. El precio ronda hasta ahora entre 9 y 12 euros el más caro.

En este camping de Oloron Sainte Marie encontramos a una pareja de Bélgica que viajan en bici con su pequeños de menos de dos años. Lo llevan en un carrito extra conectado detrás de la bici del papá.

Llovió durante la madrugada y parte de la mañana. El camping está provisto con quinchos techados con mesa, bancas, electricidad, pileta y microondas, así que desayunamos al cobijo de este lugar y luego bajo nubes espesas retomamos la ruta.

Continúa en Francia…